Hallan ofrenda bajo la Pirámide del Sol en Teotihuacán


Un grupo de arqueólogos excavó hasta el centro de la Pirámide del Sol en la ciudad prehispánica de Teotihuacán y hallaron una ofrenda ceremonial colocada en el lugar antes de fuera construida esa estructura, informaron los expertos el martes.

La ofrenda incluye una máscara tallada en serpentina, una piedra verde, con rasgos tan detallados que los investigadores creen que podría haber sido el retrato de alguien. También hallaron 11 vasijas ceremoniales de cerámica dedicadas a un dios de la lluvia similar a Tláloc, quien fue adorado en la zona 1.500 años después, de acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, o INAH.

La ofrenda -que también contenía huesos de un águila alimentada con conejos, de un felino y un canino- estaba colocada en una base de piedra caliza donde la pirámide, la más alta de México, fue levantada aproximadamente en el año 50 de la era actual.

“Sabemos que fue depositada como parte de una ceremonia de consagración a la construcción de la Pirámide del Sol”, dijo el arqueólogo Enrique Pérez Cortés, del INAH. “Probablemente al inicio de su edificación, hace más de 1.900 años”.

Los expertos siguieron un antiguo túnel excavado por investigadores a través de la pirámide en la década de 1930, el cual pasaba muy cerca del centro, y luego excavaron pequeñas extensiones y pozos de exploración a partir de ese corredor.

El descubrimiento apunta hacia los primeros días de la todavía misteriosa cultura teotihuacana. En la base fueron encontrados los restos de tres estructuras anteriores a la pirámide. Los arqueólogos tienen conocimiento de que el significado ceremonial del lugar, con una función vinculada al inframundo, es también anterior a la pirámide.

También se encontraron siete entierros humanos, algunos de infantes. 

Susan Gillespie, una profesora asociada de antropología en la Universidad de Florida que no participó en el proyecto, calificó al hallazgo de “emocionante e importante, aunque yo no diría que fue inesperado” considerando que las ofrendas consagratorias eran generalmente colocadas en pirámides de Mesoamérica.

“Es emocionante que lo que parece un conjunto consagratorio original de los cimientos para lo que llegó a ser la pirámide más grande (de altura) en México (y una de las más altas del mundo) fue finalmente encontrado, después de muchos esfuerzos coordinados por hallarlo”, dijo Gillespie en un correo electrónico.

Consideró que el descubrimiento permite tener una mejor imagen de la continuidad de las prácticas religiosas durante la larga historia de Teotihuacán; algunos de los mismos elementos encontrados en la ofrenda aparecen en murales antiguos pintados en los muros de la ciudad varios siglos después.

La ciudad fue fundada hace casi 2.500 años, y llegó a tener una influencia dominante en la arquitectura, el comercio y la cultura en grandes extensiones del México antiguo. Pero la identidad de sus gobernantes sigue siendo un misterio. La ciudad fue abandonada para cuando los aztecas llegaron a la zona en los 1.300 y le dijeron el nombre de Teotihuacán, que significa “el lugar donde los hombres se vuelven dioses”.

Fuentes: El Universal

0 comentarios:

Gracias por comentar o compartir esta noticia.