¿Qué es la muerte? ¿Es el fin de la vida o el principio de otra? ¿A dónde vamos cuando morimos?

Desde que el hombre tiene conciencia de sí mismo, ha intentado saber lo que hay detrás del fenómeno de la muerte, pero, a pesar del gran interés que suscita este tema, a muchos de nosotros nos cuesta hablar de ello ... ¿Por qué?

Sin duda la razón principal es de carácter psicológico y cultural: Es un tema "tabú". Tenemos la sensación, quizá sólo de forma subconsciente, de que hablar de la muerte nos enfrenta con la perspectiva de la nuestra; la hace más cercana y real. Por tanto, para ahorrarnos el trauma psicológico, decidimos evitar el tema siempre que nos sea posible.

La segunda razón es de carácter religioso: La religión católica nos ofrece la promesa de una vida eterna en el más allá. Pero resulta paradójico que una cultura como la occidental, con un pilar tan grande en la tradición judeocristiana, que promete una vida mejor tras la muerte, sea justamente la cultura donde la muerte genere un tabú tan grande. En cambio, para otras culturas la muerte no supone un evento trágico ni dramático, sino una transición a otra vida mejor.

También podría decirse que nos cuesta hablar de la muerte porque el hombre siempre ha sentido temor a lo desconocido, generalmente queremos tener respuestas para todo, en cambio este tema, sólo genera preguntas e incógnitas.

La última razón se relaciona con la naturaleza del lenguaje. En su mayor parte, las palabras del lenguaje humano aluden a las cosas que hemos experimentado con nuestros sentidos físicos, sin embargo, la muerte es algo por lo que nunca hemos pasado, por lo tanto, hablar de ello nos resulta muy difícil.

Lo que sí es cierto es que muchas personas nos hemos acercado al umbral de la muerte, la hemos vivido de cerca y hemos vuelto. También hay personas que afirman ver "fantasmas", otros oyen voces o susurros, hay magníficos profesionales que se dedican al campo de las psicoimágenes y parafonías. Otros recurren al uso de la Ouija para ponerse en contacto con el más allá. Los médiums nos transmiten mensajes de nuestros seres ya fallecidos, Todo esto, nos lleva a pensar que sí existe una vida después de la vida, una continuidad.
Como todos sabemos, en todos los pueblos primitivos se han encontrado vestigios de la creencia en la inmortalidad del alma ...

En la Prehistoria, los primeros en celebrar algo parecido a un ritual de enterramiento fueron los neandertales hace cien mil años. Se han encontrado algunos cadáveres dispuestos en fosas y cubiertos de un polvo rojo llamado "ocre". Se cree que el rojo era símbolo de vida y que el polvo de este color garantizaba al difunto el nacimiento en el otro mundo.
Hace 35,000 años, el homo sapiens sapiens también realizaba rituales, pero más elaborados. El hecho de que se realizara todo un ritual en torno al cadáver, indica que existía la creencia de que algo de éste sobrevivía a la muerte.

Antiguo Egipto ... Para los egipcios el alma del difunto accedía al reino de Am- Duat donde se enfrentaba al juicio de Osiris, dios de la inmortalidad. Pero antes de vivir en paz para toda la eternidad el alma tenía que sufrir varias pruebas reveladas en el Libro de los Muertos. En el Antiguo Egipto, la muerte no era considerada como un final sino como un nacimiento, pero para ello, los egipcios creían que el cuerpo tenía que estar intacto para que el alma pudiera pasar a la siguiente vida, es por ello que desarrollaron el proceso de momificación y embalsamiento.

El Hinduismo cree en la reencarnación por lo que la muerte lejos de ser motivo de tristeza lo es de alegría ta que es la puerta a una nueva vida. Según el Hinduismo, existen 16 puertas divididas en tres grupos por las que el alma puede salir. Según el grupo de puertas por las que sale, accederá a un reino superior, renacerá o se transfigurará y entrará en un ciclo de renacimientos (Saṃsāra) . El objetivo final de las prácticas de esta religión es perfeccionarse hasta poder salir del ciclo de reencarnaciones, esta liberación se llama "Moksa" ... Si consiguen su fin alcanzarían el tan ansiado Nirvana.

Según la filosofía yoghi, existen diferentes planos de existencia, al desprendernos del cuerpo material, nuestra alma pasa al plano siguiente, más sutil y con una más alta rata vibracional.

La religión taoísta tampoco teme a la muerte. Para ellos la muerte es algo natural que pertenece al hombre tanto como la vida misma. Hay algo muy curioso, y es que los taoístas diferencian entre espíritu y alma. El espíritu pertenece a los vivos y es energía Yang. En cambio, cuando una persona muere, desaparece su espíritu y da lugar a su alma, parte del Yin. El taoísta no busca acabar con la reencarnación, pero, haciéndose uno con el Tao espera conseguir la inmortalidad.

Para los budistas, la muerte no es más que un tránsito. Según nuestros actos en vida, tendremos un Karma favorable o negativo. Es decir, por esta ley de causa- efecto, renaceremos de una forma u otra, por eso la muerte no es un final, sino un cambio de ropajes.

El Bardo Thodol es un tratado sobre cómo orientar a un ser que está a punto de fallecer y cómo guiarlo hacia el Bardo después de la muerte física, para que no se deje desviar por los recuerdos de la vida y los seres que acaba de dejar. El lama o monje budista, le explica al moribundo o muerto la naturaleza de las experiencias de los Bardos a los que se tiene que enfrentar después de la muerte, y le recuerda que todo lo que ve son proyecciones de la mente, todo es maya, ilusión ... En los Bardos, se encontrará con demonios, entidades iracundas, espíritus hambrientos, pero también con los distintos maestros espirituales o Budas a quienes sabrá identificar para librarse de los peligros y así transitar con éxito hacia su nueva vida. Este proceso dura 49 días.
Una buena forma de comprender el tema que estamos tratando sería acercarnos lo más posible al umbral de la muerte, ese umbral del que muchas personas hemos regresado. Como podéis intuir vamos a hablar sobre las experiencias cercanas a la muerte, también conocidas en este mundo como ECM ....

¿Qué son las ECM?

Las ECM son eventos lúcidos que ocurren cuando una persona está insconciente, sin latidos cardíacos detectables, sin respiración, y los registros electroencefalográficos son planos, es decir, son experiencias que suceden cuando alguien ha estado ea punto de morir o ha pasado por una muerte clínica y ha sobrevivido.

¿En qué consisten esos eventos? ¿Qué suele suceder durante una ECM?

Las ECM pueden incluir algunos de los siguientes elementos que son más o menos comunes en todas las personas que viven tal experiencia ...

Experiencias fuera del cuerpo (verse flotar)
Ausencia de dolor
Incremento de la percepción sensorial
Repaso de la vida
Visión de un túnel oscuro
Luz al final del túnel
Visualización de paisajes indescriptibles
Encuentro con seres místicos o familiares y amigos ya fallecidos que vienen a su encuentro
Barrera o límite
Regreso voluntario o involuntario al cuerpo físico

También existen unas consecuencias psicológicas. Los "regresados" experimentan ciertos cambios después de vivir esta experiencia. No tienen miedo a la muerte, son más altruistas y sobre todo, más espirituales. Algunos desarrollan habilidades psíquicas como una intuición agudizada, clarividencia, ven las emociones y sentimientos de los demás y lo más sorprendente .... Su cuerpo puede emitir un campo electromagnético que rompe cualquier aparato eléctrico con un simple roce.

Algunos también desarrollan experiencias tipo "psi", como experiencias extracorpóreas, encuentros con apariciones, percepción de auras, comunicación con los muertos o memorias de vidas pasadas. Pero también es cierto, que a muchas personas les cuesta retomar sus vidas después de algo así, el guardar dentro de sí esta experiencia, el no saber interpretarla y ordenar la experiencia desde un punto de vista emocional les conduce en numerosas ocasiones a padecer alteraciones de tipo psicológico. Por ejemplo, hay muchos casos de jóvenes y adolescentes que acaban consumiendo drogas o alcohol para olvidar esta experiencia y es que ... Sólo la aceptación de esta experiencia puede tener efectos positivos en nosotros.

ECM negativas ...

En 1985 la investigadora británica Margot Grey expuso sin tapujos que más de un 12% de las ECM que muchos pacientes relataban eran negativas y con un vínculo en común: el sentimiento de pánico, de miedo extremo, la angustia de encontrarse con su vida y la soledad más terrible y absoluta. Estas experiencias serían algo así como un aviso a navegantes- como una advertencia en la que nos dicen que debemos cambiar y virar el timón de nuestra vida.

Pero ... ¿Cuándo comienzan a estudiarse las ECM?

El término ECM fue utilizado por primera vez por el Dr. Raymond Moody en su libro "Vida después de la Vida", publicado en 1975 y que marcó el comienzo de la investigación contemporánea de las ECM.

Pero, registros de experiencias similares se encuentran en la Biblia, en los Diálogos de Platón, en el cuadro de El Bosco ... "Subida al Empíreo", también en el "Libro Egipcio de los Muertos", en el Bardo Thodol e incluso fueron varios los relatos de ECM que aparecieron en revistas de medicina en el S. XIX, así que podemos creer que el tema de las ECM no es algo que sucede en pleno S. XXI, no está de moda ahora, sino que ha sucedido desde el comienzo de la humanidad!
Desde entonces, Kenneth Ring, Michael Sabom, Elisabeth Kübler-Ross, Pim Van Lommel, el Dr. José Miguel Gaona Cartolano y muchos otros médicos y físicos han investigado ampliamente este fenómeno ... Incluso son muchas las prestigiosas y renombradas Universidades que investigan los fenómenos de pos vida y algunas de ellas incluso estudian las evidencias sobre la reencarnación. Por poner un ejemplo, el Proyecto AWARE estudia la supervivencia de la conciencia tras la muerte.

¿Qué explicaciones proponen los científicos y médicos?

En la mayoría de los casos están dando a conocer algo simple y común, y es que tenemos una conciencia o alma que trasciende más allá del cuerpo físico, algo que no es ni sobrenatural ni mágico, sino que está siendo demostrado por la ciencia moderna.

El Dr. Pim Van Lommel, cardiólogo y científico holandés asegura que "La conciencia no está en el cerebro, sino que sobrevive a la muerte". La conciencia sería algo así como una radio, que mientras vivimos aquí, sintoniza con este Universo. Por lo tanto, la muerte es sólo un cambio de conciencia, una transición porque "morimos en una dimensión para pasar a otras".

La Dra. Kübler-Ross fue una psiquiatra y médico suiza que se convirtió en el S. XX en una de las mayores expertas en el campo de la muerte al implementar modernos cuidados paliativos con personas moribundas para que éstas afrontaran el fin de su vida con serenidad e incluso alegría. La Dra. Kübler-Ross fue además una de las primeras personas en estudiar la relación que tenemos con la muerte,es por ello que estudió unos 20,000 casos de ECM. En los hospitales, la doctora Kübler-Ross observó que los pacientes, instantes antes de morir se relajaban, incluso aquellos que se habían revelado contra su propia muerte. Otros, al acercarse su final parecían tener experiencias muy claras con seres queridos ya fallecidos y hablaban con personas que ella no podía ver.

Prácticamente en todos los casos, la muerte iba precedida de una particular serenidad. Por ello, intrigada por todos los relatos que le contaban sus pacientes decidió comprobar por sí misma su veracidad.

Luego de ser inducida en dos ocasiones a una muerte artificial en un Laboratorio Médico de Virginia, la Dra. Kübler-Ross llegó a la siguiente conclusión ...

"Abandonamos nuestro cuerpo que aprisiona nuestra alma, al igual que un capullo de seda encierra la futura mariposa. Libres, como una bellísima mariposa, regresamos a nuestro hogar".
¿Qué significa esto? ... Pues que la muerte no es un fin, sino un radiante comienzo. Nuestra vida en el cuerpo terrenal es sólo una muy pequeña parte de nuestra existencia.

También hay científicos que reducen las experiencias cercanas a la muerte en fragmentos como, por ejemplo, experiencias extracorpóreas o el túnel como resultado de la hipoxia, las visiones como fruto de una alteración neurológica ... Pero, es cierto que muchas ECM ocurren en condiciones óptimas de oxigenación. Y no sólo eso, es bien conocido que la hipoxia puede causar extrañas experiencias extracorpóreas como las que relatan los pilotos sometidos a pérdidas de conciencia en máquinas de centrifugación, pero estos pilotos tienen además otros síntomas añadidos que NO suceden en las ECM: temblor de las piernas, alteración de la memoria, confusión, desorientación al despertar, cierto tipo de parálisis transitoria ....

La Hipercapnia (aumento de dióxido de carbono en la sangre) produce una desorganización de las funciones cerebrales y de la atención, mientras que durante las paradas cardiorrespiratorias no parecen producirse estos estado de confusión sino que se acentúan la sensación de alerta y atención, así como la consciencia y la memoria.

Otros alegan la administración de ciertas drogas, particularmente relacionadas con la anestesia u otro tipo de fármacos. Sin embargo, se ha comprobado que las personas que han recibido sustancias anestésicas presentan menos ECM que las que no han recibido ningún tratamiento.
Sabemos que durante las ECM las personas pueden ver, oír y percibir su alrededor con total claridad ... Cómo es posible que sean capaces de contar con total precisión como ven su propio cuerpo inconsciente, la actividad frenética de los médicos en el intento de reanimación, e incluso las conversación que allí se mantienen mientras la persona en cuestión está clinicamente muerte?

¿Cómo es posible que muchos invidentes que han nacido ciegos y cuya visión es un concepto abstracto sean capaces de narrar su experiencia con total claridad? En esos momentos, su campo visual al igual que los demás es de 360º, distinguen los colores, la brillantez, la profundidad e incluso el grado de solidez o transparencia de los objetos.

¿Cómo es posible que muchos niños e incluso discapacitados psíquicos tengan ECM idénticas a los demás? Esto demuestra sin lugar a dudas que estas experiencias son reales y no debidas a creencias preexistentes o influencias culturales entre otros.

¿Cómo es posible que ciertas personas estando en muerte clínica sean capaces de saber dónde ha puesto la enfermera sus dentaduras postizas, cómo pueden conocer hechos futuros que a la larga suceden, cómo pueden saber lo que habían dicho los médicos y los miembros de la familia cuando el cerebro estaba inactivo?

Creo que sólo hay una respuesta posible y es que ... Hay una expansión de la conciencia durante el tiempo en que el cerebro no registra actividad. El alma o la conciencia no está en el cerebro, sino que sobrevive a la muerte, por lo tanto, basándome en estas pruebas y también en mis propias experiencias, puedo afirmar con total seguridad que la muerte es sólo física, y que tras esa "atadura" que supone nuestro cuerpo tan denso y pesado, damos un salto hacia otro plano más sutil.

Deberíamos de pensar en ello y afrontar la muerte como lo que realmente es ..."La muerte es una liberación, un radiante comienzo en el que al fin regresamos a nuestro verdadero HOGAR"

Fuentes diversas de internet Aproximadamente 55.700 resultados

0 comentarios:

Gracias por comentar o compartir esta noticia.